El ejercicio de baja a alta intensidad es eficaz en la mejora de las características relacionadas con la artritis reumatoide, por ejemplo. Los programas de ejercicio físico desaceleran los daños en las articulaciones y, en ningún caso, incluye efectos nocivos sobre la enfermedad y el daño articular.
Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.